The name is derived from the word was saaffat with which the Surah begins.
The subject matter and the style show that this Surah probably was sent down in the middle of the Makkan period, or perhaps in the last stage of the middle Makkan period. The style clearly indicates that antagonism is raging strong in the background and the Holy Prophet and his Companions are passing through very difficult and discouraging circumstances.
The disbelievers of Makkah have been severely warned for their attitude of mockery and derision with which they were responding to the Holy Prophet's message of Tauhid and the Hereafter and for their utter refusal to accept and acknowledge his claim to Prophethood. In the end, they have been plainly warned that the Prophet whom they are mocking and ridiculing will overwhelm them in spite of their power and self and they will find the army of Allah encamping in the very courtyards of their houses (vv. 171-179. This notice was given at a time when there appeared no chance whatever of the Holy Prophet's success and triumph. The Muslims (who have been called Allah's army in these verses) were being made the target of severe persecution. Three- fourth of their population had already emigrated and hardly 40 to 50 of the Companions were left with the Holy Prophet in Makkah who were experiencing all sorts of the excesses with utter helplessness. Under such circumstances, in view of the apparent conditions, no one could believe that the Holy Prophet and the handful of his ill equipped Companions would ultimately attain dominance. The people rather thought that the new movement would end and be buried in the ravines of Makkah. But hardly 15 to 16 years had passed when on the conquest of Makkah precisely the same thing happened of which the disbelievers had been forewarned.
Along with administering warnings, Allah in this Surah has done full justice also to the theme of inducement and instruction in a balanced way. Brief but impressive arguments have been given about the validity of the doctrines of Tauhid and the Hereafter. Criticism has been made of the creed of the mushrikin to show the absurdity of their beliefs; they have been informed of the evil consequences of their deviations, which have been contrasted with the splendid results of the faith and righteous acts. Then, in continuation of the same, Precedents from past history have been cited to show how Allah had been treating His Prophets and their followers : how He has been favoring His faithful servants and punishing their deniers and rejectors.
The most instructive of the historical narratives presented in this Surah is the important event of the pious life of the Prophet Abraham, who became ready to sacrifice his only son as soon as he received an inspiration from Allah. In this there was a lesson not only for the disbelieving Quraish, who waxed proud of their blood relationship with him, but also for the Muslims who had believed in Allah and His Messenger. By narrating this event they were told what is the essence and the real spirit of Islam, and how a true believer should be ready to sacrifice his all for the pleasure and approval of Allah after he has adopted it as his Faith and Creed.
The last verses of the Surah were not only a warning for the disbelievers but also a good news for the believers who were passing through highly unfavorable and discouraging conditions on account of their supporting and following the Holy Prophet. In these verses they were given the good news that they should not be disheartened at the hardships and difficulties they had to encounter in the beginning, for in the end they alone would attain dominance, and the standard bearers of falsehood, who appeared to be dominant at the time would be overwhelmed and vanquished at their hands. A few years later the turn the events took, proved that it was not an empty consolation but an inevitable reality of which they had been foretold in order to strengthen their hearts.
En el nombre de Allah, el Misericordioso, el Compasivo.
¡Por los que se ponen en filas,
e impulsan en una dirección*
y leen un Recuerdo!
Que realmente vuestro Señor es Uno*.
El Señor de los cielos y de la Tierra y de lo que hay entre ambos; y el Señor de los orientes*.
Hemos embellecido el cielo de este mundo con el adorno de los astros.
Y lo hemos protegido contra todo demonio insolente.
No pueden escuchar al "Consejo Supremo"* y se les arrojan proyectiles desde todas partes
para ahuyentarlos. Tendrán un castigo perpetuo.
Aunque alguno consigue arrebatar algo y es perseguido por un lucero fulgurante.
Pregúntales: ¿Han sido ellos más difíciles de crear que quienes hemos creado? En realidad los hemos creado de barro viscoso.
Pero tú te sorprendes mientras que ellos se burlan.
Y cuando se les recuerda, no recapacitan.
Y cuando ven un signo, intentan burlarse.
Y dicen: Esto es magia pura.
¿Acaso cuando estemos muertos y seamos tierra y huesos vamos a ser devueltos a la vida?
¿Y nuestros primeros padres?
Di: Así es, y vosotros seréis humillados.
Será un solo grito y entonces se quedarán mirando.
Y dirán: ¡Ay de nosotros! Este es el día de la Rendición de Cuentas.
Este es el Día del Juicio cuya realidad habíais negado.
¡Reunid a los que fueron injustos, a sus esposas y a los que adoraban
fuera de Allah, y conducidlos camino del Ŷaḥim!*
Y detenedlos que van a ser preguntados.
¿Qué os pasa que no os ayudáis unos a otros?
Pero no, ese día estarán rendidos.
Irán unos a otros preguntándose.
Dirán: Veníais a nosotros por la derecha.*
Dirán: No, es que vosotros no erais creyentes.
No teníamos ningún poder sobre vosotros, erais gente que se excedía.
Se hizo realidad la palabra de Nuestro Señor en nuestra contra y ahora lo estamos probando.
Y os extraviamos, pues realmente estábamos extraviados.
Ese día estarán compartiendo el castigo.
Así es como actuamos con los que hacen el mal.
Cuando se les decía: No hay dios sino Allah, se llenaban de soberbia
y decían: ¿Acaso vamos a dejar a nuestros dioses por un poeta poseso?
Pero no, él ha venido con la verdad confirmando a los Enviados.
Es verdad que gustaréis el doloroso castigo.
Pero sólo se os pagará por lo que hayáis hecho.
Se exceptúan los siervos sinceros de Allah.
Ésos tendrán una provisión conocida:
Frutos. Y se les honrará
en los Jardines del Deleite.
Estarán enfrente unos de otros, recostados sobre lechos.
A su alrededor se harán circular copas de un vino de manantial.
Blanco y dulce para quienes lo beban.
No producirá indisposición ni se embriagarán con él.
A su lado habrá unas que sólo tendrán mirada para ellos, de grandes ojos.
Como perlas* escondidas.
Y se dirigirán unos a otros preguntándose.
Dirá uno de ellos: Yo tenía un compañero inseparable
que decía: ¿Es que tú eres de los que creen en esas cosas?
¿Acaso cuando estemos muertos y seamos tierra y huesos se nos van a pedir cuentas?
Y dirá*: ¿Podéis asomaros?
Y se asomará viéndolo en medio del Ŷaḥim.
Le dirá: ¡Por Allah que estuviste a punto de perderme!
De no haber sido por una gracia de Mi Señor habría sido de los traídos aquí.
¿Cómo iba a ser que muriéramos
y todo se redujera a la muerte sin más y no fuéramos castigados?
Realmente esto* es el gran triunfo.
Que para algo así actúen los que lo hagan.
¿Qué es mejor hospedaje, ésto o el árbol del Ẓaqqum?
Lo hemos hecho como castigo para los injustos.
Es un árbol que sale de la raíz misma del Ŷaḥim,
cuyos brotes parecen cabezas de demonios.
De él comerán y se llenarán el estómago.
Y además tendrán una pócima de agua hirviendo.
Luego, su lugar de destino será el Ŷaḥim.
Ellos habían encontrado a sus padres extraviados.
Y se dejaron llevar tras sus huellas.
Antes que ellos ya se había extraviado la mayor parte de las primeras comunidades.
A pesar de que les habíamos enviado advertidores.
Pero mira cómo acabaron los que recibieron la advertencia.
Sin embargo no es así con los siervos de Allah sinceros.
Y así fue como Nuḥ nos llamó. ¡Qué excelentes Respondedores!
Lo salvamos a él y a su familia de la gran catástrofe.
E hicimos que fueran sus descendientes los que quedaran.
Y dejamos su memoria para la posteridad.
Paz para Nuḥ en todos los mundos.
Así es como recompensamos a los que hacen el bien.
Él fue uno de Nuestros siervos creyentes.
Luego, a los demás, los ahogamos.
Y por cierto que Ibrahim era de los suyos.
Cuando se presentó ante su Señor con un corazón puro.
Y cuando les dijo a su padre y a su gente: ¿Qué es lo que estáis adorando?
¿Buscáis dioses fuera de Allah por falsedad?
¿Y qué pensáis del Señor de los mundos?
Y observó las estrellas.
Y dijo: Realmente voy a enfermar*.
Entonces se apartaron de él dándole la espalda.
Se fue para sus dioses y dijo: ¿Es que no coméis?
¿Qué os pasa que no habláis?
Entonces fue sigilosamente hacia ellos golpeándolos con fuerza.
Y acudieron a él rápidamente.
Dijo: ¿Adoráis lo que vosotros mismos habéis esculpido,
cuando Allah os ha creado a vosotros y a lo que hacéis?
Dijeron: Haced una construcción a propósito para él, para arrojarlo a las llamas.
Quisieron tenderle una trampa pero los dejamos reducidos a lo más bajo.
Y dijo: Me voy hacia mi Señor, Él me guiará*.
¡Señor mío! concédeme una descendencia de justos.
Y le anunciamos un niño que habría de tener buen juicio.
Y cuando éste alcanzó la edad de acompañarle en sus tareas, le dijo: ¡Hijo mío! He visto en sueños que te sacrificaba, considera tu parecer. Dijo: ¡Padre! Haz lo que se te ordena y si Allah quiere, encontrarás en mí a uno de los pacientes.
Y cuando ambos lo habían aceptado con sumisión, lo tumbó boca abajo.
Le gritamos: ¡Ibrahim!
Ya has confirmado la visión que tuviste. Realmente así es como recompensamos a los que hacen el bien.
Esta es, de verdad, la prueba evidente.
Y lo rescatamos poniendo en su lugar una magnífica ofrenda*
Paz para Ibrahim.
Y le anunciamos a Isḥaq, Profeta de entre los justos.
Y lo bendijimos a él y a Isḥaq. Entre su descendencia hubo quien hizo el bien y hubo quien fue claramente injusto consigo mismo.
Y así fue como favorecimos a Musa y a Harún.
Y los salvamos a ellos y a su gente de la gran catástrofe.
Los auxiliamos y fueron los vencedores.
Les dimos el Libro clarificador
y les guiamos por el camino recto.
Dejando su memoria para la posteridad.
Paz para Musa y Harún.
Ellos fueron dos de Nuestros siervos creyentes.
E Ilias, que fue uno de los Enviados.
Cuando dijo a su gente: ¿Es que no tenéis temor?
¿Invocáis a Baal abandonando al Mejor de los creadores?
Allah es vuestro Señor y el Señor de vuestros primeros padres.
Lo tacharon de mentiroso y se les hará comparecer.
No es así, sin embargo, con los siervos de Allah sinceros.
Dejamos su memoria para la posteridad.
Paz para la gente de Yasin*.
Es cierto que era uno de Nuestros siervos creyentes.
Y Luṭ, que fue uno de Nuestros Enviados,
cuando lo salvamos a él y a todos los de su familia
excepto una vieja que fue de los que se quedaron atrás.
Luego, aniquilamos a los demás.
Vosotros pasáis sobre ellos mañana
y noche. ¿Es que no vais a entender?
Y Yunus, que fue uno de los Enviados.
Cuando escapó en la embarcación completamente cargada.
Y echaron a suertes y fue de los perdedores.
El pez se lo tragó y fue así reprendido*.
De no haber sido porque era de los que glorificaban,
habría permanecido en su vientre hasta el día en el que todos serán devueltos a la vida.
Así lo arrojamos a un playa desierta, maltrecho*.
E hicimos que creciera sobre él una planta de calabaza*.
Y lo enviamos a cien mil o más.
Creyeron, y los dejamos disfrutar por un tiempo.
Pregúntales cómo es que tu Señor tiene hijas y ellos tienen hijos.
O si ha creado a los ángeles hembras y ellos son testigos.
¿O es que acaso, basándose en sus patrañas, dirán
que Allah ha engendrado? Realmente son mentirosos.
¿Es que ha escogido tener hijas en vez de tener hijos?
¿Qué os ocurre? ¿Cómo podéis juzgar así?
¿Es que no recapacitáis?
¿O es que acaso tenéis alguna prueba contundente?
Traed pues vuestro libro si es verdad lo que decís.
Y han atribuído relación de parentesco entre Él y los genios, cuando los genios saben bien que ellos habrán de comparecer.
¡Sea glorificado Allah por encima de lo que Le atribuyen!
Pero no son así los siervos de Allah sinceros.
Y en verdad vosotros y aquellos a los que adoráis,
no podréis extraviar a nadie en contra de Allah.
Sólo quien haya de entrar en el Ŷaḥim.
Y no hay ninguno de nosotros que no tenga una estación conocida.*
Es cierto que vamos en filas.
Y somos en verdad los glorificadores.
Y es verdad que han dicho:
Si tuviéramos alguna memoria de los que nos precedieron
seríamos servidores sinceros de Allah;
y sin embargo se han negado a creer en él*. Pero ya sabrán.
Ya dimos Nuestra palabra a Nuestros siervos Enviados.
Y fueron auxiliados.
Y es verdad que Nuestros ejércitos fueron vencedores.
Apártate pues de ellos hasta que llegue el momento.
Y obsérvalos, que ya verán.
¿Acaso están pidiendo que se acelere el castigo?
Cuando descienda a sus patios: ¡Qué mal amanecer el de los que fueron advertidos!
Apártate de ellos hasta que llegue el momento.
Y observa, que ya verán.
¡Gloria a tu Señor!, el Señor del poder por encima de lo que Le atribuyen.
Paz sobre los Enviados.
Y la alabanza a Allah, el Señor de los mundos.